La grabación de “La Máquina...” conllevó un sinnúmero de situaciones que vale la pena mencionar (por lo menos, tres de ellas): 

1    Fue el debut como cantante solista de Hilda Lizarazu, lo que implicó situaciones de extremo nerviosismo en todo el plantel. Pero gracias al apoyo del Dr. Orellano -amigo personal de D. Melingo- quien aplicó una serie de sedantes opiáceos en algunos de los integrantes de la banda, los problemas se desvanecieron a las pocas horas de haber comenzado y la performance de Hilda fue más que satisfactoria. 

2     La programación de los secuenciadores y baterías digitales (recién comenzaban a realizarse en Argentina) estuvo a cargo de Eduardo Goiman -quien ahora es el titular de EDUSOFT, empresa líder en sistemas de computación en el país-.

3    La canción “Viéndolo” se llamaba originalmente “Viendo a Biondi”, pero ese título no pudo ser registrado porque se necesitaba la autorización del yerno de Biondi -el actor cubano Pepe Díaz Lastra- con quien fue prácticamente imposible establecer una comunicación telefónica .

                                                                                           ATRAS